

La pimienta negra es un fruto originario de India, que se obtiene de una planta denominada Piper Nigrum. Se le reconocen diversas propiedades antiinflamatorias, diuréticas y antioxidantes. Así como una excelente aliada para el control de peso.
La pimienta negra tiene una gran cantidad de propiedades nutricionales: es un condimento rico en magnesio, tiene una alta cantidad de potasio, contiene minerales esenciales como el calcio y el hierro, sodio, fósforo y zinc, proteínas, y una gran variedad de vitaminas.
Es un excelente condimento natural para reducir el consumo de sal en las comidas de tu dieta diaria.
La pimienta negra ofrece a los alimentos un sabor picante y aromático además de aportar beneficios para la salud. Se considera que funciona como un estimulante natural de las secreciones gástricas favoreciendo los procesos digestivos en el estómago.
El consumo de pimienta negra ayuda a mantener limpias las arterias.
Según un estudio de la Universidad de Tailandia, la pimienta negra y la piperina ––alcaloide que se encuentra en esta especia––reducen la absorción del colesterol.
Este condimento puede estimular su funcionamiento, incrementando la proliferación de las células conocidas como esplenocitos, que son responsables de la liberación de sustancias inmunitarias.
Tiene propiedades antibacterianas por lo que puede combatir infecciones, resfriados, gripes, alivia la sinusitis y las congestiones nasales.
En un estudio realizado por el Kings College de Londres, investigadores descubrieron que la piperina puede estimular la pigmentación en la piel. Ayuda en el tratamiento del vitiligo, que provoca despigmentación.
Además, la alta cantidad de antioxidantes presentes en la pimienta negra previenen o reparan los daños causados por los radicales libres en la piel.